domingo, 11 de enero de 2015

Respira mientras te asfixias.

Paradójico verdad? Y aún así hoy en día es algo que sufrimos, padecemos sin siquiera notarlo.
Cuando estamos dentro de una "relación tóxica" por ejemplo; cuando sufrimos el trabajar en un contexto de "violencia psicológica"; cuando atravesamos una separación y estamos en el aire entre nuestros hijos, la mujer- hombre que mora en nuestro interior y ese otro que en adelante es "un extraño-a" con el que enfrentaremos una batalla que con suerte terminará cuando nuestros hijos crezcan.
Cuando perdemos a un ser querido, amado, y tenemos que respirar mientras sientes cada vez menos fuerzas te quedan.
Cuando ves desmoronarse la vida de una amiga y solo te queda acompañar, estar.
De todo eso se trata respirar mientras te asfixias, un estado psicológico del que pocas veces nos damos cuenta, y que nuestro organismo da alertas con ataques de pánico, ansiedad, estrés y sus variantes.
Como de todo, de ésto también se sale, de ésto también se aprende. Muchas veces es aislar el corazón y tomar una decisión que nos haga bien, ser un poco egoístas con los demás y hacerlo por uno mismo, que el beneficio sea para nosotros, nos darán la espalda aquellos a los que no les importe nuestro bienestar y quedarán quienes solo les importe que estemos bien. Ahí es cuando respiraremos tranquilos.
Saludos #GuilleWrede

No hay comentarios:

Publicar un comentario